
El murmullo del aire
trae el dulce del misterio
un latido de eternidad
al escuchar tu credo irreal
aferrado a un cielo que no entiendo
recorriendo tu mundo espiritual
sentado descubriendo riendo
pretendiendo abrazar el azar
Me refugio en suspiros
delirios de la razón en su corazón
designios de un Dios que no siento
y lo bebo sediento de su inspiracion
Creo en tu voz, natural
creo en tu voz, que calma mis demonios
creo en tu voz, frágil
te regalo mi ultima confianza
Te vuelvo a recordar
ausente, en silencio, callada
sin aliento me miento, no olvide
con arrepentirme lo que no viví
me dio por llorar
se va mi voz en desilusión
predicar, dar las espaldas
no entiendo tu fe por el amor
sensacion vive en excesiva razón
desconoció tus palabras
quien eres que te llevas la soledad
seré siempre el eterno soñador.